martes, 10 de marzo de 2009

MIERCOLES DE CENIZA












La Cuaresma se inicia 40 días antes del Domingo de Ramos con la imposición de la Ceniza, Cuarenta días en los que para los cristianos se impone la oración, la penitencia y el ayuno.

La imposición de la ceniza, es un rito en el que a los cristianos se les recuerda la fugacidad de la vida en la tierra y les anima a prepararse para la vida eterna en el Cielo. Para su imposición el sacerdote puede utilizar, principalmente dos sentencias: “Recuerda que polvo eres y en polvo te convertirás" o sobre todo “Arrepiéntete y cree en el Evangelio”.

Pero, ¿cuál es el origen de este rito?; Antiguamente los judíos acostumbraban a cubrirse de ceniza cuando hacían algún sacrificio y también conocemos que los ninivitas usaban la ceniza como signo de su deseo de conversión de su mala vida.

En los primeros siglos de la Iglesia, las personas que querían recibir el Sacramento de la Reconciliación el Jueves Santo, se ponían ceniza en la cabeza y se presentaban ante la comunidad vestidos con un "hábito penitencial", que representaba su voluntad de convertirse.

Ya en el año 384 d.C., la Cuaresma adquirió un sentido penitencial para todos los cristianos y desde el siglo XI, la Iglesia de Roma acostumbra poner ceniza al iniciarse la Cuaresma.

Para ello se utilizan las cenizas que se obtienen quemando las palmas usadas el Domingo de Ramos de año anterior, como símbolo de que lo que fue signo de gloria pronto se reduce a nada. Por otra parte, el período de Cuaresma también fue usado para preparar a los que iban a recibir el Bautismo en la noche de Pascua, imitando a Cristo con sus 40 días de ayuno.

En conclusión, la imposición de ceniza es una costumbre que recuerda a los cristianos que algún día van a morir y que su cuerpo se reducirá a polvo, al igual que ocurrirá con todo lo material que atesoren; Por el contrario, todo lo espiritual lo conservaran durante toda la eternidad, incitándoles de este modo a cultivar más lo espiritual que lo material, y preparándoles de este modo a vivir una Semana Santa en plenitud.

1 comentario:

MANUEL dijo...

Muy interesante entrada acerca del poder regenerador de la ceniza, ¿qué nos traslada tal vez a tiempos neolíticos...? No somos nadie y en polvo nos convertiremos.